En una crítica rotunda, Vyacheslav Volodin, presidente de la Duma estatal rusa, ha designado recientemente la deuda nacional de EE. UU. como una "pirámide financiera global", diseñada para engañar a las naciones y su población.
Argumentó que la precaria capacidad de Estados Unidos para pagar su deuda estaba transformando rápidamente al dólar estadounidense en un activo peligroso.
La “pirámide financiera global” y el dólar “tóxico”
La gestión fiscal de los Estados Unidos ha sido objeto de críticas, con Volodin denunciando enérgicamente el trato que el gobierno estadounidense da a su deuda nacional.
El líder de la cámara legislativa inferior de Rusia expresó su preocupación por la creciente deuda de EE. UU. y la elevación habitual del techo de la deuda de la nación, una medida que se ha realizado más de 100 veces en la historia reciente.
Volodin destacó este tema en su canal de Telegram: “La historia de las pirámides financieras está plagada de fracasos. Pero la deuda nacional de EE.UU. se desvía de la norma. Es una pirámide financiera global concebida por Washington con el objetivo explícito de engañar a las naciones y a sus ciudadanos”.
El estadista ruso sostiene que el debilitamiento de la capacidad del gobierno de EE. UU. para pagar su deuda hace que el dólar estadounidense sea un activo precario para retener, calificándolo de moneda "tóxica".
Las preocupaciones expresadas por Volodin surgen cuando un número cada vez mayor de naciones están haciendo la transición a monedas alternativas para evitar este riesgo. Según cifras oficiales, la deuda de EE. UU. para 2023 se situó en 31,4 billones de dólares, con un aumento de casi 10 billones de dólares en los cinco años anteriores.
El año 2020 vio un aumento significativo del 19% en la deuda nacional debido a las consecuencias de varios programas de ayuda de COVID-19.
El dilema de la deuda y la búsqueda de alternativas
La escalada de la deuda nacional provoca invariablemente un aumento en los intereses pagados por ella. En este contexto, Volodin expresó sus temores al afirmar: “Considere esto, en 2023, el pago total de intereses de la deuda nacional de EE. UU. podría alcanzar los 1,5 billones de dólares, casi un tercio de todos los ingresos presupuestarios de EE. UU.”.
A la luz de estas preocupaciones, el presidente de la Duma sugirió que los estados individuales dentro de la federación estadounidense exploren alternativas al dólar, minimizando así el riesgo financiero para sus dent .
Actualmente, 23 estados están contemplando legislación que sancionaría el uso de oro y plata como formas de pago.
En un desarrollo notable, Arkansas promulgó una ley en abril que hizo que los lingotes y las monedas de oro y plata fueran de curso legal, eximiendo así a las transacciones realizadas con estos metales de las obligaciones tributarias.
Texas, por otro lado, está impulsando un proyecto de ley que introduciría una moneda digital respaldada por oro como moneda de curso legal.
Esta crítica audaz de Rusia subraya las crecientes preocupaciones sobre el panorama fiscal estadounidense y los riesgos potenciales asociados con una dependencia excesiva del dólar estadounidense.
A medida que la narrativa en torno a la estabilidad económica mundial continúa evolucionando, todos los ojos, sin duda, estarán puestos en cómo responde EE. UU. a estas afirmaciones y si introducirá reformas en sus sistemas financiero y económico.