La agencia italiana de protección de datos emitió una suspensión del chatbot de inteligencia artificial propiedad de OpenAI, ChatGPT, y comenzó una investigación sobre posibles violaciones de las normas de privacidad. La acción sigue a la noticia de la violación de datos de la plataforma el 20 de marzo. En consecuencia, se han impuesto restricciones inmediatas a las operaciones de procesamiento de datos para los usuarios italianos de ChatGPT.
El organismo de control de datos italiano también descubrió que OpenAI no proporcionó a los usuarios información suficiente sobre los datos que recopila y almacena. Además, destacaron que no había ninguna base legal que justificara la recopilación masiva de datos personales por parte de la IA mientras entrenaba sus algoritmos. Además, notaron que las respuestas del chatbot ChatGPT no siempre reflejan la realidad, lo que da lugar a imprecisiones al procesar datos personales.
Además, la agencia señaló que las propias reglas de protección de datos de ChatGPT se violaron potencialmente ya que no existe un filtro para verificar las edades de los usuarios, lo que pone a los menores en riesgo de estar expuestos a respuestas inadecuadas para sus mentes en desarrollo.
El Centro de Inteligencia Artificial y Política Digital (CAIDP, por sus siglas en inglés) también ha expresado su preocupación por el lanzamiento del chatbot ChatGPT con IA y presentó una queja en su contra el 31 de marzo. Según el CAIDP, el chatbot es tendencioso, engañoso y representa un riesgo potencial para seguridad pública y privacidad. Este problema no se limita a Italia sino que se extiende a otras partes del mundo.
