En un paso significativo hacia la mejora de la eficiencia y la interoperabilidad del sistema monetario global, el Banco de Pagos Internacionales (BPI) ha unido fuerzas con bancos centrales de varios países, junto con instituciones financieras privadas, para lanzar el “Proyecto Ágora”. Esta iniciativa pionera explora la tokenización dentro del marco monetario, aprovechando tecnologías innovadoras como los contratos inteligentes trac la programabilidad.
Concepto de libro mayor unificado para unir activos tokenizados
Bajo el paraguas del Proyecto Ágora, el BIS propone desarrollar un concepto de libro mayor unificado que facilite la integración perfecta de los depósitos tokenizados de los bancos comerciales y el dinero tokenizado del banco central mayorista. Al unir estos dos niveles del sistema monetario, la iniciativa busca superar las ineficiencias estructurales que prevalecen en los actuales mecanismos de pago transfronterizos. Estas ineficiencias surgen de requisitos legales, regulatorios y técnicos dispares en todas las jurisdicciones, agravados por los horarios de operación y las diferencias de zonas horarias.
Hyun Song Shin, asesor económico y jefe de investigación del BIS, subraya el potencial transformador de la tokenización, que combina la función de mantenimiento de registros de las bases de datos tradicionales con las reglas y la lógica que rigen las transferencias dentro del marco de un banco central. Este enfoque promete revolucionar los sistemas de pago, ofreciendo mayor eficiencia y transparencia manteniendo al mismo tiempo la integridad de la estructura monetaria de dos niveles.
Explorando el futuro de las monedas digitales
Cecilia Skingsley, directora de BIS Innovation Hub, imagina un futuro en el que una infraestructura de pagos común facilite una interoperabilidad perfecta entre varias monedas digitales. Esta visión se alinea con los esfuerzos más amplios del BPI para explorar el potencial de las monedas digitales de los bancos centrales (CBDC) y aprovechar los beneficios de blockchain en las finanzas. El BIS tiene como objetivo desbloquear nuevas vías para la innovación y la eficiencia en el panorama financiero global fomentando la colaboración entre las partes interesadas públicas y privadas.
El lanzamiento del Proyecto Ágora subraya el compromiso continuo del BIS de fomentar la innovación y la colaboración en el ámbito financiero. Basándose en sus recientes iniciativas que exploran la ciberseguridad , la lucha contra los delitos financieros y la promoción de las finanzas verdes, el BIS sigue a la vanguardia en la exploración de tecnologías de vanguardia y sus implicaciones para el sistema monetario global. Project Promise, una colaboración entre el BIS, el Banco Nacional Suizo y el Banco Mundial, ejemplifica este compromiso al buscar desarrollar una plataforma de prueba de concepto para pagarés tokenizados.
Período de gracia para que los bancos privados se unan a la asociación
Las instrucciones y requisitos específicos para participar en el Proyecto Ágora se emitirán a su debido tiempo, y se proporcionará un período de gracia para que los bancos privados se inscriban en la asociación. Este esfuerzo de colaboración entre bancos centrales e instituciones financieras privadas subraya el compromiso compartido de impulsar la innovación y la eficiencia en el ecosistema financiero global. A medida que se desarrolla el proyecto, las partes interesadas pueden anticipar avances innovadores en la tokenización de activos y los pagos transfronterizos, sentando las bases para un sistema monetario más interconectado y resiliente.
El Proyecto Ágora representa un paso audaz para aprovechar el potencial transformador de la tokenización de activos dentro del sistema monetario global. Al fomentar la colaboración entre bancos centrales, instituciones financieras privadas y otras partes interesadas, el BIS pretende superar las ineficiencias estructurales y desbloquear nuevas vías para la innovación en los pagos transfronterizos. A medida que avanza la iniciativa, las partes interesadas pueden mirar hacia un futuro en el que las monedas digitales y la tecnología blockchain desempeñen un papel fundamental en la configuración del futuro de las finanzas.