Recientemente, la criptomoneda memética Pepe (PEPE) ha enfrentado desafíos en múltiples frentes. Los contribuyentes de esta excéntrica moneda digital han informado de un acceso no autorizado a su canal principal de Telegram, instando a la comunidad a etiquetarlo como una estafa.
Mientras tanto, una destacada cuenta asociada al PEPE en X, anteriormente conocida como Twitter, también cayó en manos de presuntos estafadores. En medio de estos desafíos, el valor de la moneda ha disminuido y hay un cambio notable en el sentimiento de la comunidad.
El canal de Telegram comprometido, que era un importante medio de comunicación para los entusiastas de Pepe, contaba con casi 45.000 seguidores en el momento del presunto hackeo. Desde la violación, los contribuyentes se han distanciado de cualquier información difundida a través de este canal. Ahora están reuniendo a la comunidad PEPE para ayudar a cerrar el grupo comprometido, enfatizando la necesidad de establecer una plataforma de comunicación nueva y segura.
En las redes sociales, personas con intenciones potencialmente maliciosas ahora controlan la cuenta “LordKekLol” en X, que alguna vez fue una voz confiable para la comunidad PEPE. Se sospecha que los nuevos administradores de esta cuenta promueven estafas, introducen nuevas monedas y engañan a los inversores.
Contrariamente a las afirmaciones hechas por el equipo PEPE original, el propietario actual de la cuenta refuta las acusaciones de piratería. En cambio, sugieren que el equipo del PEPE está experimentando desacuerdos internos y “divisiones”.
Los tweets de varios miembros de la comunidad se han hecho eco de las preocupaciones sobre la autenticidad de la información proveniente de estos canales. Muchos recomiendan precaución e instan a sus seguidores a verificar cualquier oportunidad de inversión o anuncio asociado con Pepe. En el momento en que se publicó este artículo, la moneda Pepe estaba cayendo y su valor cayó más del 3%.
Las importantes ventas masivas exacerbaron aún más esta caída a principios de septiembre de 2023. Los grandes tenedores, aparentemente perdiendo la fe, se han deshecho de más de 2,3 billones de PEPE a cambio de Ethereum (ETH). La confianza de la comunidad recibió otro golpe cuando, según se informa, los contribuyentes del proyecto arrojaron la asombrosa cantidad de 16 billones de PEPE en el intercambio centralizado OKX.
Pepe, que alguna vez fue la criptomoneda meme de la que más se habló en 2023, está navegando en aguas turbulentas. Con acusaciones de piratería informática, disputas en equipo y un valor de mercado en caída, el futuro de esta moneda digital está en juego.