En medio de las crecientes preocupaciones sobre los avances tecnológicos de China en el campo de la inteligencia artificial (IA), un informe reciente sugiere que los agentes chinos pueden estar utilizando la noción de armas de IA "tecnológicamente avanzadas" como medio para intimidar a las potencias occidentales, incluido el Reino Unido. Si bien se reconoce la amenaza, algunos expertos sostienen que la urgencia y la capacidad de estas armas de IA pueden exagerarse con fines estratégicos.
Amenazas cuestionables de IA
El profesor Anthony Glees, un destacado experto en el campo de la inteligencia y la seguridad, ha planteado dudas sobre el alcance de las capacidades de IA de China y su intención. En una entrevista exclusiva con el Daily Star, el profesor Glees expresó escepticismo sobre si China realmente posee el armamento avanzado de inteligencia artificial que supuestamente está utilizando para amenazar a las naciones occidentales. Sostiene que estas amenazas pueden ser una cortina de humo calculada, destinada a desviar la atención de sus intenciones y capacidades reales.
Dos tipos de información
Según el profesor Glees, países como China y Rusia están interesados en adquirir dos tipos críticos de inteligencia: conocimiento sobre las capacidades militares de sus adversarios y conocimiento de sus intenciones estratégicas. Si bien la IA tiene el potencial de ayudar a recopilar dicha información, el profesor Glees cree que el juicio basado en la evidencia disponible es un aspecto crucial que la IA actualmente no puede replicar. Por lo tanto, el supuesto uso de amenazas de IA por parte de China puede servir como un medio para intimidar a las potencias occidentales en lugar de una demostración legítima de capacidades de IA.
Desvío a través de la IA
En esencia, el profesor Glees sostiene que, si bien China puede poseer tecnología avanzada, podría estar aprovechando el miedo a la IA para desviar la atención y los recursos. Sostiene que las agencias de inteligencia como el MI6 deberían centrarse en métodos de espionaje tradicionales, como evaluar las capacidades militares y comprender las intenciones estratégicas, en lugar de enredarse en las complejidades de la inteligencia artificial y la tecnología de reconocimiento facial. Esta perspectiva desafía la noción de que la IA por sí sola representa una amenaza inminente para el Reino Unido.
Prevalece el espionaje tradicional
El profesor Glees enfatiza que el espionaje tradicional sigue siendo la forma más crucial y exitosa de recopilación de inteligencia. Alega que agentes rusos, iraníes y chinos continúan participando en actividades tradicionales de espionaje en suelo británico, lo que subraya la importancia perdurable del espionaje convencional en las operaciones de inteligencia.
La amenaza percibida de la IA
A medida que crecen las preocupaciones sobre los avances tecnológicos de China en inteligencia artificial, los expertos cuestionan la validez de las supuestas amenazas de la IA. El profesor Anthony Glees sugiere que estas amenazas pueden ser exageradas y empleadas estratégicamente para intimidar a las potencias occidentales, incluido el Reino Unido.
En el mundo de la recopilación de inteligencia, se buscan dos tipos críticos de información: conocimiento de las capacidades militares y conocimientos sobre las intenciones estratégicas. El profesor Glees sostiene que, si bien la IA puede ayudar a recopilar datos, no proporciona el juicio necesario basado en la evidencia disponible, lo que genera dudas sobre el verdadero alcance de las capacidades de IA de China.
El uso de amenazas de IA por parte de China puede servir como una táctica de distracción para desviar la atención y los recursos de sus intenciones y capacidades reales. El profesor Glees sostiene que los métodos de espionaje tradicionales siguen siendo el medio más eficaz de recopilación de inteligencia, desafiando la noción de que la IA representa una amenaza inminente y tecnológicamente avanzada para el Reino Unido.