La falta de claridad y orientación de la Comisión de Bolsa está dificultando que las empresas de cifrado con sede en EE. UU. registren sus tokens o productos.
En una entrevista reciente, el presidente de la SEC, Gary Gensler, enfatizó que el proceso de registro para proyectos criptográficos es tan simple y fácil como registrar una corporación. Sin embargo, muchas startups han descubierto que la realidad es mucho más compleja.
Los comentarios de Gensler se produjeron después de que Kraken, un intercambio de criptomonedas, no pudo registrar su producto de participación y tuvo que pagar daños y cerrar el programa. El presidente afirmó que Kraken y otras empresas deberían haber sabido cómo registrarse y que eligen no hacerlo.
Sin embargo, la falta de orientación procesable y un marco regulatorio adaptado a los activos digitales ha hecho imposible que la mayoría de los protocolos criptográficos cumplan con los requisitos de registro.
Desafíos en el proceso de registro de la SEC
Las recientes acciones contra Coinbase, una empresa registrada en la SEC, también resaltan las dificultades que enfrentan las empresas de cifrado al tratar de cumplir con las regulaciones.
La SEC envió un aviso de Wells a Coinbase para enumerar tokens que consideraba valores sin registrarse como bolsa de valores y ofrecer un producto de participación no registrado.
Sin embargo, Coinbase había presentado previamente una petición de reglamentación a la SEC en 2022, buscando claridad sobre los problemas no resueltos necesarios para un mercado funcional de activos digitales, incluido el registro como intercambio y participación. La petición quedó sin respuesta.
Comenzar una nueva corporación implica presentar documentos y formularios que son relativamente fáciles y sencillos, pero registrar un producto criptográfico con el regulador es mucho más complejo.
Los formularios de registro, como el Formulario S-1, generalmente requieren un ejército de abogados y millones de dólares para completarlos, lo que dificulta que las pequeñas empresas cumplan con las regulaciones.
Los formularios de registro actuales también se basan en un conjunto de divulgaciones que son inadecuadas para los aspectos únicos de las criptomonedas y dejan a los inversores vulnerables.
Varios proyectos criptográficos han intentado registrarse, ya sea como parte de un acuerdo de la SEC o por su propia cuenta, pero la mayoría ha fallado. Las luchas y los fracasos resultantes de estos proyectos ilustran cómo el “camino hacia el registro” no es viable actualmente.
Falta de claridad
La falta de claridad y orientación de la agencia, combinada con la insuficiencia de los formularios de registro actuales, ha dificultado que la mayoría de los protocolos criptográficos cumplan con las regulaciones.
El formulario S-1 es el formulario de registro más común que utilizan las empresas privadas cuando quieren cotizar en bolsa o realizar una oferta pública inicial (IPO).
Sin embargo, el marco de divulgación actual está fundamentalmente desalineado con la mayoría de los tokens, ya que supone una relación emisor-valor que no existe en los sistemas descentralizados.
Se requieren varias lagunas en las divulgaciones por la forma y los lugares donde se necesita claridad para que el registro sea un camino viable e informar adecuadamente a los inversores.
La posición actual de la SEC afirma que la mayoría de los proyectos criptográficos deben registrarse, mientras que al mismo tiempo hace que el registro sea imposible. Esto equivale a una prohibición regulatoria de las criptomonedas que excede la autoridad de la SEC.
Generar consenso sobre la viabilidad de los proyectos criptográficos que se registran en la SEC bajo el régimen actual puede impulsar una discusión verdadera y honesta sobre cómo se debe regular esta industria, con Capitol Hill como el lugar de compromiso.