Según un anuncio reciente del gobernador del Banco Central de Irán, Abdul Nasser Hemmati, varias empresas de criptominería podrán continuar con sus operaciones mineras solo si siguen un conjunto de reglas establecidas.
Hemmati mencionó que para tener la "licencia" para extraer criptomonedas en Irán, los mineros deberán cumplir con los precios de la electricidad basados en las exportaciones y también reciclar las ganancias obtenidas en la economía local.
El CBI se apresuró a mencionar que no admitirán ninguna criptomoneda o moneda digital cuyo valor estará determinado por cosas como el oro o la moneda fiduciaria local, el rial.
Este anuncio es una bocanada de aire fresco para los criptomineros con licencia en Irán, ya que la industria parece haber explotado en el país.
El único problema eran los mineros sin licencia que usaban cosas como invernaderos y fábricas para sus actividades mineras. De acuerdo con la ley local, los centros de producción como los mencionados anteriormente, recibieron subsidios en el consumo de energía.
Sumar el hecho de que los mineros realizaban operaciones sin una licencia adecuada además de "aprovecharse" de las leyes locales fue un tema controvertido en Irán durante mucho tiempo.
A pesar de que la criptominería sigue estando estrictamente prohibida en el país, los legisladores dijeron que la producción está permitida.
Esta rápida indulgencia hacia la industria podría ser producto de la angustia de los legisladores iraníes debido a la superación de las sanciones estadounidenses que han estado minando la economía local.
Si Irán no encuentra formas alternativas de generar un ingreso significativo, ciertamente está en peligro de sufrir una recesión grave.