En un desarrollo reciente, el presidente dent Biden decidió prohibir que su nuevo director de comunicaciones, Ben LaBolt, se involucre en asuntos legales, investigaciones o contratos que trac empresas de tecnología o criptomonedas a las que representó anteriormente.
Algunas de estas empresas incluyen Meta Platforms Inc., Haun Ventures LLC y Shopify Inc. A pesar de estas restricciones, LaBolt podrá asesorar al presidente dent su enfoque para regular las empresas de criptomonedas y redes sociales, según la Casa Blanca .
Navegando los límites éticos
El nombramiento de LaBolt se produce en medio de una creciente presión sobre la administración Biden para que mejore su participación en el enfoque de Washington hacia la moneda digital.
Los ejecutivos de las criptomonedas han expresado su preocupación por la falta de regulaciones claras en la industria, ya que los inversores enfrentan pérdidas potenciales que ascienden a miles de millones de dólares.
Las restricciones impuestas a LaBolt son consistentes con las reglas éticas seguidas por otros altos funcionarios de la Casa Blanca.
Habiendo trabajado previamente como vocero de la campaña dent de Barack Obama y como asistente en la Casa Blanca, la experiencia de LaBolt en el campo de las comunicaciones es extensa.
Sus antiguos clientes en su empresa de comunicaciones incluyen el intercambio de criptomonedas Uniswap y Andreessen Horowitz, uno de los primeros inversores en Coinbase Global Inc. LaBolt también se desempeñó como portavoz de West Street, la oficina familiar del director ejecutivo de Meta, Mark Zuckerberg, y su esposa, Priscilla Chan.
El camino hacia la criptorregulación
El dent Biden ha sido conocido por sus esfuerzos para frenar el poder de las grandes empresas tecnológicas. Como dijo Robyn Patterson, vocera de la Casa Blanca, en un comunicado a Bloomberg Government: “El dent impulsa nuestra política”.
Biden también ha expresado sus críticas a las empresas de redes sociales por permitir la difusión de información errónea sobre el coronavirus, acusando a la industria en 2021 de “matar personas” con ficción pandémica.
El colapso de FTX en 2022 ha agregado combustible al fuego, lo que provocó un impulso renovado por la legislación y las normas para regular la industria. El 9 de marzo, Biden firmó una orden ejecutiva (EO) sobre activos digitales que, aunque no especificaba ninguna acción regulatoria, describía un proceso interinstitucional que involucraba a 16 funcionarios de alto rango.
Estos funcionarios tienen la tarea de producir una serie de informes elaborados, con plazos que van desde 90 días hasta más de un año a partir de la publicación de la EO.
A medida que la administración de Biden lidia con los complejos problemas que rodean a las empresas de criptomonedas y redes sociales, las restricciones impuestas a LaBolt resaltan la necesidad de establecer límites éticos dentro de la Casa Blanca.
En un panorama digital en constante evolución, la experiencia de LaBolt sin duda contribuirá a los esfuerzos de Biden para establecer un marco regulatorio justo y transparente para estas industrias florecientes.